Pasta y Pizza

Masa de pizza casera sin gluten

¿Quién dijo que no se puede disfrutar de una buena pizza siendo celíaco? Esta receta te permite preparar una base de pizza sin gluten crujiente por fuera, tierna por dentro y con un sabor delicioso. Es perfecta para personalizar con tus ingredientes favoritos y disfrutar de una noche de pizza casera en familia o con amigos. Además, al estar hecha con harinas naturales como la de arroz y garbanzo, aporta una textura equilibrada y un sabor suave que combina con todo.

Ingredientes

  • 150 g de harina de arroz
  • 100 g de almidón de maíz (maicena)
  • 50 g de harina de garbanzo
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 cucharadita de levadura seca sin gluten
  • 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
  • 200 ml de agua templada

Cómo preparar la masa de pizza casera sin gluten

  1. En un bol grande, mezcla bien las harinas (arroz, maicena y garbanzo) con la sal y la levadura seca. Asegúrate de que todo esté bien combinado para que la masa tenga una textura uniforme y la levadura se reparta de manera homogénea.
  2. Agrega el agua templada poco a poco junto con el aceite de oliva. Mezcla con una cuchara al principio, y cuando empiece a unirse, continúa con las manos hasta obtener una masa pegajosa. A diferencia de las masas con gluten, esta no necesita un amasado intenso, ya que no se desarrolla la red de gluten. La textura será algo más húmeda, pero no te preocupes, es completamente normal.
  3. Cubre la masa con un paño limpio o film transparente y déjala reposar en un lugar cálido durante aproximadamente una hora. La masa debería aumentar un poco su volumen, aunque no tanto como una masa tradicional.
  4. Una vez reposada, colócala sobre una hoja de papel de horno ligeramente engrasada. Con las manos mojadas en aceite o una espátula, extiende la masa hasta formar una base del grosor deseado. Si te gusta más crujiente, hazla más fina; si prefieres una base más esponjosa, déjala un poco más gruesa.
  5. Hornea la base sola durante unos 10 minutos a 200 °C (horno precalentado), para que se precueza antes de añadir tus ingredientes favoritos. Luego, sácala, añade salsa, queso, verduras, embutidos o lo que prefieras, y hornea nuevamente hasta que el queso se derrita y los bordes estén dorados. 

¡Una pizza casera deliciosa, sin gluten y 100% personalizable!